SUBASTA DE MAESTROS ANTIGUOS, CONTEMPORÁNEO Y ARTE COLONIAL
Lote 200:
Óleo sobre cobre montado sobre bastidor con parquet, 65 x 97cm (sin marco), 75 x 107 cm (con marco).
Marco de 107 cm por 75 cmEste magnífico cuadro, fechado a principios del siglo XVII, representa el Juicio Final y lleva en la esquina inferior derecha el monograma "DF". En la tradición cristiana, el Juicio Final es el momento en que Dios juzga a los vivos y a los muertos, decidiendo quiénes entrarán en el paraíso por haber llevado una vida virtuosa y quiénes serán condenados al infierno por sus actos inmorales. La obra sirve como un recordatorio de la importancia de vivir de manera virtuosa y prepararse para el día del juicio.
El Juicio Final es un tema central en la teología cristiana y ha sido representado en el arte a lo largo de los siglos, tanto en pintura como en escultura. Frans Francken el Joven (1581-1642), junto con su taller, fue uno de los artistas que abordó este tema, al igual que grandes maestros como Miguel Ángel, cuyo icónico fresco del Juicio Final decora la bóveda de la Capilla Sixtina. Procedencia: Colección particular francesa.